El próximo domingo 25 de mayo,
tendremos la ocasión de celebrar el cumpleaños de la Patria,
agradeciendo a Dios la bendición de compartir la vida en un país libre.
Antes que nada, la celebración de un nuevo aniversario patrio es una
oportunidad para valorar el don de la patria y comprometernos con las
causas comunes que requiere la participación de todos los ciudadanos.
Obviamente
cada vez que pensamos en la Patria también llegan a nuestra memoria
tantas preocupaciones y carencias que compartimos: la crisis social y
económica, la inseguridad, la incertidumbre en cuanto al futuro de
nuestra juventud. Sin quedarnos en la queja y en el desaliento, es una
oportunidad para pensar en la patria que entre todos -desde la
corresponsabilidad y la participación- debemos construir.
Cada
uno de nosotros somos parte de esta patria que consolidamos entre
todos, desde el esfuerzo sincero y el trabajo honrado, elementos
esenciales para el crecimiento de cualquier nación. Por encima de todo,
quisiera que tengamos muy presentes los principios y valores de la
democracia que siempre nos permite dar lo mejor de nosotros a la patria
desde la libertad y el amor.