Todavía reina el entusiasmo y furor que ocasionaron las
variadas ofertas del “Black Friday” propuesto en Posadas, provocando
ventas espectaculares en los comercios adheridos a este novedoso
sistema. Creo que ha sido toda una primicia y sin duda ha movilizado a
miles de personas en nuestra ciudad y de zonas aledañas. A pesar de la
crisis económica que vivimos, todos han podido ganar más y la city
posadeña adquirió un verdadero clima de alegría y satisfacción a quienes
la propusieron. Esta hermosa iniciativa despertó mi reflexión acerca de
los tantos valores que en nuestra ciudad podemos rescatar.
En
primer lugar creo que en medio de las situaciones de crisis lo que no
hay que perder es la esperanza y la creatividad. A veces no resulta
sencillo descubrir la oportunidad en los momentos de crisis, pero si
perseveramos y nos apoyamos en Dios con la oración y la contemplación,
podremos aprender de ellas. Efectivamente las situaciones de crisis nos
dan la oportunidad de ser creativos para encontrar nuevas formas de
abordar nuestras angustias y aprender de ellas. Por eso lo fundamental
es abrirnos a la novedad que nos trae situaciones de crisis de la cual
podemos salir fortalecidos, conociéndonos mejor, aumentando nuestra
creatividad, profundizando una relación. Dios no nos pone pruebas que no
podamos superar, sin duda que cuando estamos ante este tipo de
situaciones es para que aprendamos, trabajemos u observemos algo que nos
ayudará en nuestro crecimiento como personas.
Las
noticias daban cuenta de que muchos comercios obtuvieron un incremento
de hasta 500% en sus ventas, todo un récord. Realmente sorprendente y
esperanzador. Esta realidad nos permite ver que los pequeños pasos que
damos en situaciones de crisis, como un descuento de 50% tiene un efecto
multiplicador que nos sorprende. Qué bueno tener presente que esta
ecuación, vale para todos los ámbitos de la vida. Un pequeño paso
positivo, en momentos de crisis en las relaciones interpersonales, en la
familia, en el trabajo seguramente traerá resultados nunca
imaginados.
La unión y la colaboración, son
pasos esenciales para salir adelante en momentos de crisis. La decisión
de unirse y colaborar entre todos, haciendo pequeños sacrificios,
perdiendo un poco de las ganancias, hizo posible que muchos pudieran
accederse a tantas cosas que no estarían a sus alcance de otra manera.
Creo que el valor de la renuncia y el sacrificio traen aparejado grandes
aportes en tiempos de crisis.
Ojalá estos
ejemplos de cooperación, sean un paso que cambie el esquema de nuestra
sociedad, que la convierta cada vez más fraterna y solidaria, donde
todos ganan compartiendo y solidarizándose. Que el espíritu del“Black
Friday” no solo sea un evento aislado del fin de semana, cuando hay
dinero, sino una actitud, mejor aun un estilo de vida durante todo el
mes, incluyendo el cuarto viernes. Que se multiplique la creatividad, ya
que sin duda, son una alternativa válida ante la crisis.
Sin
olvidar que por encima de todo, es fundamental que no se pierda la
alegría de compartir la vida que vale mucho más que las cosas que
podamos comprar o vender. Seguramente como hemos visto el fin de semana
pasado, cuando hay ganas de compartir; la alegría se multiplica y esto
vale para todos los ámbitos de la vida. Cuando más nos abrimos al
diálogo y se faciliten mecanismos que propongan un buen descuento,
desaparecerán las actitudes egoístas e individualistas y aflorará la
multiplicación de la alegría en nuestros hogares y en nuestra sociedad.
Que también seamos creativos para compartir la vida con amor y entrega
generosa y así llenar de alegría nuestra ciudad que será el mejor tesoro
que podamos tener entre todos.
P. Juan Rajimon
Misionero del Verbo Divino
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